FOTOS - MARZO 2009

Vistas desde las eras de San Isidro

Vistas desde las eras de San Isidro con la Peña Amaya y la cordillera nevadas.



Si quieres verlo con mejor calidad, pincha en HQ que aparece en la parte de abajo del vídeo una vez que hayas comenzado su reproducción..

POCO A POCO VA LLEGANDO (2)

Así está la pista del Plantío, ahora.
Queda pintarla y poner las porterías y las canastas, además de los remates.
Lo próximo, el parque infantil al lado de la pista.



Foto sacada el 13-03-2009.

POCO A POCO VA LLEGANDO

El Plantío el sábado 7 de marzo.
Como se puede ver en la foto, la pista continúa.

Enaratio Fundationis: comentarios al primer capítulo

La “Enarratio fundationis”, palabras con las que comienza el manuscrito de Ildelfonso Francés Gil, es un libro en papel, encuadernado en pergamino, con setenta hojas foliadas más las dos que sirven de introducción, la primera de las cuales está enmarcada por una greca hecha, al parecer por el mismo redactor.

Francés Gil describe los detalles de la fábrica de la iglesia de la Inmaculada Concepción de Villaveta, comenzada a construir en 1529, pero nos ofrece con extraordinario acierto, los precedentes de la misma.

Si habéis leído la traducción, supongo que estaréis de acuerdo conmigo en que es una bonita y curiosa historia que alude a las dos iglesias que hubo, antes de 1529, en este pueblo, y al clérigo que guardaba la suya “de noche con la espada en blanco porque no la demoliesen”.

Habla de dos parroquias: la de Santiago y la de San Esteban. De ellas, actualmente no se conserva nada más que el recuerdo: los dos barrios en que aún se divide la Villa que mantienen estos nombres, y en el centro del retablo mayor de la nueva iglesia, a derecha e izquierda, las grandes tallas de San Esteban y Santiago recordando las antiguas parroquias.

En el “barrio de arriba”, que vemos en esta fotografía, debió de estar la iglesia de San Esteban. De ella no queda actualmente ningún vestigio.

Hasta hace pocos años, en el barrio de abajo quedaba, en la casa que muchos conocemos como de la "señora María", había un arco de medio punto que hacía de puerta de entrada de la vivienda. En la clave de ese arco aparecía visible una cruz, indicando que fue espacio. En este lugar pudo estar la iglesia de Santiago.

Además de las dos iglesias parroquiales, cita el manuscrito la ermita de Santa María, llamada también “Nuestra Señora la Antigua”, donde estuvo colocado el Santísimo y se celebraban los oficios sagrados mientras, demolidas ya aquellas iglesias, aún no podían tener lugar en la nueva que estaban construyendo.

Esa ermita se encontraba en la tierra de Santa María donde queda el crucero marcando su emplazamiento.

Ildelfonso Francés Gil, al explicar la construcción de la torre de la iglesia, habla de un cuarto edificio religioso en Villaveta: la ermita de Nuestra Señora de la Concepción. También alude a un hospital.

Según el manuscrito, en épocas anteriores a la construcción de la actual iglesia, en Villaveta hubo cuatro edificios religiosos: las parroquias de Santiago y San Esteban, las ermitas de Santa María o Nuestra Señora la antigua y la de Nuestra Señora de la Concepción. Ésta última, la que dio nombre a la actual iglesia, en el lugar que hoy ocupa la torre.

El 27 de junio de 1529 se comenzó a edificar la nueva iglesia y "vinieron a la dicha iglesia, que ahora es, y pusieron la primera piedra en el capialzado, que está a la parte de oriente, la cual bendijeron y pusieron con un cuero de cal virgen, y acabado de asentarla, dieron fresca fruta y vino a los que presentes estaban, y a los niños de diez años y doce abajo, a cada uno cinco azotes, a honor de los cinco sentidos, para buena memoria".

Francés Gil, que escribe:“Y para que, vamos dando principio a nuestra fundación, me valgo ahora de un cartón, que se escribió cuando se fundó la iglesia, por un escritor muy fidedigno", ya que, según dice el cartón,: " yo, Juan Gil Esteban, hice escribir esta memoria porque me acuerdo de todo, y también ver celebrar la cofradía siendo de edad de seis años, y la planta de la iglesia de ocho años. Donde recibí mis cinco azotes, que están firmes en mi memoria, y por esta causa me acuerdo de todo lo dicho, y en realidad de verdad lo firmo de mi nombre, siendo de edad de sesenta y dos años, porque fui bautizado el día de San Juan Bautista, año de veintiuno, Juan Gil.”

Ildelfonso Francés Gil y, más en concreto, Juan Gil, autor del “Cartón”, nos habla, no sólo de las dos iglesias, las dos ermitas y el hospital, sino también del Palacio de los Adelantados de Castilla del que hoy no hay ninguna señal pero si que está perfectamente localizado el lugar donde estuvo ya que, según se ha ido pasando de generación a generación entre los habitantes de este pueblo, se hallaba situado en la tierra de los “Torrejones”, vulgarización de Torreones.